sábado, 15 de mayo de 2010

¿Por qué mujer-es en construcción? 1a parte.

Hola de nuevo...

Esta vez quiero iniciar reconociendo, que ser mujer es de las mejores cosas que colorean mi existencia. Pero creo que todo inicia, desde el sentido y la fuerza que me enseñaron las mujeres de mi familia... Para nosotras ser una mujer ha significado ser valiente, trabajadora, inteligente, apasionada, entregada y capaz de inventar mundos mejores para los que amamos... todas sabemos de labores de la casa. Nuestra mayor herencia gira en torno a la importancia de construir hogares, como espacios nutritivos y reparadores para el corazón y el cuerpo... Viene a mi mente el recuerdo de mi abuela tejiendo verdaderas obras de arte, mi madre en plena alquimia en la cocina, transformando trozos de carne, verduras y hierbas en deliciosos guisos que curan el alma y convertían el desayuno o la comida en un festín digno de reyes...

Por mi parte, lo mío lo mío es tejer, aunque no lo creas... mi labor cotidiana es tejer historias, que nutran el alma... Te preguntarás, pero eso qué... bueno, yo amo las palabras, las historias y conversar, por lo que disfruto tejer historias de las vidas que toco, construyendo versiones que muestren dones, virtudes, logros, aprendizajes, reconciliando la idea del cielo y el infierno. pues aún en el infierno se pueden encontrar maravillosos tesoros...

Claro mientras construimos estas historias, surgen versiones de la historia oficial y buscamos aquellas que iluminan los caminos recorridos con la luz de la compasión y la amabilidad, pasando así, de "La mujer es o debería ser..." a mujeres posibles, identidades posibles plenas de recursos... y entonces podemos mirarnos como constructoras, como agentes activas de cambios personales, de los que amamos y de nuestro entorno...

¿Dónde? en nuestras conversaciones casuales, cotidianas o terapéuticas, por ahora en un espacio como éste que tiene la intensión de promover la reflexión... y espero a partir de tus comentarios a la conversación

Pero... Esta historia continuará...

Antes de nuestra pausa, me gustaría preguntarte... ¿cuántas versiones posibles de tí conoces?

No hay comentarios:

Publicar un comentario